“A 120 imágenes por segundo tus ojos quieren más y más”, explicaba el hollywoodense director de cine Ang Lee (Brokeback Mountain, La vida de Pi) en la primera proyección en la zona EMEA de clips de su última película Billy Lynn’s Long Halftime Walk (2016), una producción de Sony TriStar Pictures de inminente estreno que cuenta la historia de un soldado que luchó en la Guerra de Irak. La proyección en 3D, a 120 fps, con resolución 4K y un asombroso brillo de 28 pies-Lambert (fL) por ojo, fue programada este año en el IBC Big Screen Experience.

 

El veterano director del espacio, Julian Pinn, presentó la sesión afirmando: “Creo que no exagero si digo que hoy estamos haciendo Historia del Cine”, y destacó después lo que la audiencia estaba a punto de vivir: la proyección de los clips de la película con el “proyector Christie®Mirage, el único capaz de mostrar contenidos 3D con resolución 4K, a 120fps y con brillo de 28 fL”.

 

La Serie Christie Mirage se ha convertido en habitual en aplicaciones de visualización 3D, en parques de atracciones o en parques temáticos, por su capacidad para alcanzar simultáneamente alta frecuencia de imagen y alta resolución, gracias a TruLife™, la plataforma electrónica de Christie dotada de un procesamiento de vídeo de hasta 1,2 gigapíxeles por segundo.

 

Pinn pasó dieciocho meses trabajando para llevar la experiencia a IBC. La sesión fue memorable, no sólo por la reacción de la audiencia ante los clips de la película, sino por el ilustrador debate que tuvo lugar sobre el estrado entre los miembros del equipo de la película: su director Ang Lee, el supervisor técnico Ben Gervais, el montador del film Tim Squyres, y Scot Barbour, Jefe de Tecnología de Producción de Sony Pictures Entertainment. Para los nueve minutos de visionado del clip se instalaron dos proyectores Christie Mirage 4KLH, versión láser del Mirage original basado en lámpara xenón. Un equipo técnico de Christie dio soporte a la proyección.

 

Ang Lee es célebre por el dramatismo argumental de su cine, pero también por su entusiasmo ante las nuevas tecnologías, como demostró en su día al elegir el 3D para La vida de Pi. Lee cuenta que el equipo de producción decidió hacer la película a 120fps porque la HFR elimina la mayoría de las limitaciones asociadas con el 3D a 24fps. Ben Gervais admitió: “No nos planteamos ver la película así, pues ninguno de nosotros conocía esa modalidad (120fps, 4K). Hasta que una semana antes del inicio del rodaje nos topamos con los proyectores Mirage de Christie. Quedamos pasmados. Nunca habíamos visto algo semejante”.

 

La sala de proyecciónes se beneficia de lo último en tecnología de proyección

Tim Squyres, montador de la película, cuenta que al empezar a rodar había que editar a la resolución más alta a la que podían hacerlo, a 60fps: “Estábamos al límite de capacidad del sistema. En eso se presenta Christie en la sala de montaje con los proyectores Mirage. Teníamos la mejor sala de proyección del Planeta y queríamos que el material se viera de la forma más parecida posible a como se estaba rodando.”

 

Esa capacidad de ver lo que se filmaba a diario a 120fps y 4K tuvo un impacto directo en el rodaje. Al hablar de las escenas situadas en Irak, Ang Lee explica: “La luz solar era abrasadora, y todo se veía. No podíamos usar maquillaje”. En relación con la claridad y el realismo, se sincera: “Aquella nitidez nos asustaba: ¡la interpretación del actor quedaba totalmente a la vista!”. Pero valora muy positivamente las ventajas artísticas: “Lo mejor para mí eran los rostros. Como digo, la claridad hacía que todo se viera, obligándonos a cambiar el lenguaje fílmico. Había que filmar muy de cerca a Billy Lynn. Sentías lo que él sentía, y su mirada transmitía a la perfección lo que estaba pensando”.

 

El debate llegó a eso que Pinn llama “la interacción de arte y ciencia», sobre la que Lee declaró: “Te pone en tu sitio. El artista ha de responder a lo que la tecnología le va dando. Me atrevería a decir que estamos en un momento clave en la historia del cine. He de recalcar que la imagen se ha capturado de tal forma que mejora en todos los formatos (de 24fps a 120 fps)”. Una interesante observación de Lee y su equipo es que la química entre el arte y la tecnología difiere según sea el nivel de frecuencia de imagen y de resolución, aunque, para Lee, “todos los niveles tienen sus cualidades. El arte está en la compensación. Creo que contar historias aporta sabiduría a la vida. Y nosotros estamos siempre contando historias. La diferencia está en cómo las contemos”. Y este contador de historias por antonomasia adopta la última tecnología para llevar la exploración de su arte más lejos aun. “Creo que tanto al artista como a la industria les queda mucho para ponerse al día. Dejo a los operadores de cámara la tarea de cómo hacerlo. No estamos más que en el principio”.

 

Christie Mirage: un ancho de banda de procesamiento de vídeo sin rival

La Serie Christie Mirage, con el ancho de banda de procesamiento de TruLife, está presente en espacios recreativos, casinos, museos y lugares públicos. La cabeza de proyector Mirage 4KLH de Christie® —la versión láser empleada en la proyección de IBC— combina el incomparable ancho de banda de procesamiento de vídeo de la serie Mirage con Christie Freedom®, el sistema de iluminación por láser más brillante del mundo. El proyector puede alcanzar 60.000 lúmenes por cabeza, y 120.000 cuando se utiliza en configuración 6P dual (sistema de seis colores primarios). En el Rai Auditorium de IBC, la configuración fue dual con Mirage 4KLH en columna. La especificación de 28 f-L para la pantalla Harkness Matt Plus de 17 metros de ancho por 6,69 de alto exigía 72.000 lúmenes, y los módulos láser fueron alimentados en consonancia. Una ventaja del sistema de iluminación láser Christie Freedom es que los bancos láser están separados del proyector y son apilables y escalables.ibc-big-screen_1 ibc-big-screen_2 ibc-big-screen_3 ibc-big-screen_announce