Aftersun

Año: 2022

País: Reino Unido

Dirección: Charlotte Wells

Guion: Charlotte Wells

Música: Oliver Coates

Fotografía: Gregory Oke

Reparto

Paul Mescal, Francesca Corio, Celia Rowlson-Hall, Kayleigh Coleman, Sally Messham, Harry Perdios, Ethan Smith

Sinopsis

Sophie (Francesca Corio) reflexiona sobre unas vacaciones que hizo con su padre (Paul Mescal) 20 años atrás. Los recuerdos reales e imaginarios llenan los espacios entre las imágenes.

Crítica:

Unas vacaciones de verano de Sophie, una niña de 11 años con su padre, recién separado, sirven a la directora para firmar su primer largometraje en donde rememora unas vivencias de hermosos recuerdos. Charlotte Wells incluye reiteradamente imágenes que figuran como tomadas por la niña (o sea, ella misma) con una cámara tomavistas de aquella época, con poca resolución, algo pastosas pero realistas, principalmente contemplativas, y en las que no pasa nada, aparte de una evocadora ternura y un componente de juego paterno filial en donde la niña filma a su padre como una manera de matar el tiempo, pero que 20 años después, vistas con los ojos de la hija adulta, adquieren una admirable importancia documental muy emotiva de esa relación.

Es una película en la que no hay estructura cinematográfica de género, ni diálogos chispeantes de comedia, ni secuencias dramáticas que nos lleven a un clímax con necesidad de un distendido desenlace. Todo lo que se nos muestra está muy sostenido en lo cotidiano. Desde ese punto de vista es una narración plana, de momentos troceados de vida en donde parece que, en cada escena se ha parado el tiempo, como si no existiese pasado ni futuro. Imágenes en donde nada parece relevante, excepto esa relación de cercanía, familiaridad y confianza entre un padre y una niña preadolescente, en comunión con todo lo que pasa a su alrededor. Fogonazos de vida presente y nada más. Todos esos momentos esparcidos y recompuestos en el film podrían ser el resultado de unos pocos días de unas vacaciones, o la recopilación de imágenes de varios años, hecho que en nada cambiaría el sentido de la obra.

Una película especialmente personal, contemplativa, sin sobresaltos, pero de la que en todo momento la vemos con la expectativa de una apertura del desarrollo argumental que nunca llega, aunque en el último tercio del film se introduzca un suave giro con la pretensión de cerrar las débiles líneas argumentales de lo que hemos visto.

Aftersun es un film que no trasmite pasión, pero es digno, sencillo, y creo, lleno de buenas intenciones, de cuya historia se puede extraer lo que el espectador esté dispuesto a poner de su propia interpretación. Porque en el fondo, es un film que te induce a participar del mapa de sus imágenes, experiencias, o sentimientos.

P. M.