País: Dinamarca
Dirección: Nicolas Winding Refn
Guion: Roy Jacobsen, Nicolas Winding Refn
Reparto
Mads Mikkelsen, Gary Lewis, Maarten Stevenson, Jamie Sives, Ewan Stewart, Alexander Morton, Callum Mitchell, Douglas Russell
Productora: Coproducción Dinamarca-Reino Unido;
Sinopsis:
Plena Edad Media, en el siglo X. One-Eye (Mads Mikkelsen), un enigmático guerrero con una fuerza sobrehumana, que ha permanecido esclavizado durante años, mata a su amo y logra escapar con la ayuda de un niño al que lleva consigo. Tras enrolarse en un barco vikingo, emprenden un viaje que los lleva a una tierra desconocida, donde reinan el dolor y la sangre.
Crítica:
Si tuviera sentido y algo de racionalidad toda la amalgama de imágenes descarnadas y desprovistas de cualquier atisbo de humanidad que Winding Refn, hace desfilar en la pantalla en esta película, Wahlalla Rising, podríamos decir que estamos ante un film a tener en consideración en la lista de obras que marcan tendencia. En este caso, y tal como le ha quedado la obra, parece más bien un dislate realizado por un recién salido de la escuela, empeñado en dejar impronta en su primer largometraje, a través de mostrarnos la cara de un mundo -en la baja Edad Media y con el cristianismo emergente- bárbaro y salvaje, feo y violento, dominado por unos pocos hombres sin entrañas. Lo que sucede es que todo parece gratuito, elaborado y, entrenados los actores para que los personajes desfilen en una serie continuada de luchas que, se repetirán calcadas unas de otras sin llevarnos a ningún lado, a no ser a la locura de todos ellos.
Conociendo el carácter del director y su experiencia por las escuelas de cine por las que pasó, parece un film realizado para irritar a sus profesores más ortodoxos, amigos de los argumentos cerrados y contenido moral, o, para que le aplaudan los más vanguardistas. Supongo que esas serán, también, las dos tendencias que habrá en los espectadores.
La película destaca por la buena ambientación, creando una atmósfera medio infernal en la primera parte, y más cercana al primitivismo del hombre en relación con la naturaleza virgen, en el tramo final. Por otra parte, parece un boceto burdo inspirado en 2 películas antológicas (adaptadas a su vez de grandes novelas) “Aguirre, la cólera de Dios” (1972) Werner Herzog, y “Apocalipsis Now” (1979) F. Ford Coppola; básicamente, por el viaje que emprenden los personajes en ambas, a un mundo incierto y peligroso; por los paisajes y, por la especie de locura reinante. ¿Cuál es la diferencia entre aquellas y esta: que allí los hombres tenían un propósito y hacían una reflexión, fuese dentro o fuera de la locura; y en Wahlalla rising todo es posado y exhibicionismo efímero. Exceptuando el impacto visual gélido, descarnado, en contraposición con la naturaleza inmutable y contemplativa frente a la fragilidad del hombre que la pisa.