(Al otro lado del abismo)
Año: 2022
País: España
Dirección: Jorge Dorado
Guion: Natxo López
Música: Eric Claus Kuschevatzky
Fotografía: David Acereto
Reparto
Álvaro Morte, Eugenia Suárez, Verónica Echegui, Daniel Aráoz, Andy Gorostiaga, Maitane San Nicolás, Pepa Gracia
Sinopsis
Mario trabaja en un gran almacén de objetos perdidos donde custodia todo tipo de enseres acumulados durante décadas. Hace tiempo que decidió apartarse de las personas e invierte su tiempo libre en investigar la procedencia de los objetos para devolver a sus dueños pedazos perdidos de sus vidas. Tan sólo Helena, una policía local, ha podido traspasar levemente su coraza afectiva. Un día llega al almacén una maleta rescatada del fondo del río con ropa de bebé junto a unos restos humanos. Mario decide investigar por su cuenta.
Crítica:
Jorge Dorado, un asiduo en la dirección de series de televisión, estrena su segunda película a partir de un guion del también creador-guionista de series, Natxo López, escrito ya hace años, pero de vigente actualidad, y hemos de confesar que el director ha conseguido un producto muy aceptable.
Mario, el personaje que da credibilidad con solvencia Álvaro Morte, nos despierta desde el principio un halo de misterio a la vez que cierta ternura, pues, aunque se muestra huraño e introvertido es respetuoso con su entorno, ordenado y honesto en su trabajo. También nos trasmite cierta fragilidad y, esa fragilidad lo hace cercano. Desde el inicio del film, el espectador lo sigue con interés en sus pesquisas por devolver a personas que no conoce, parte de un pasado que ya lo daban por perdido definitivamente. Aunque lo hace a modo particular, no admite recompensa alguna, aparte de la satisfacción de ver la cara de agradecimiento de esas personas.
Pasadas las primeras secuencias de inmersión en el personaje, y en su empeño por descubrir el propietario de una misteriosa maleta, la historia da un gran giro y se torna compleja, oscura y peligrosa, donde descubrimos un mundo paralelo nada deseable, que se mueve en las altas esferas de la sociedad. También descubriremos la personalidad de otro Mario, más atrevido y cerebral, capaz enamorarse y de poner en riesgo su integridad física por salvar a alguien de la red de sus opresores. Es como un viaje a su interior y, al mismo tiempo, al otro lado del abismo.
Es una película bien contada, con ingredientes de drama, pero que transita igualmente por el thriller y, hasta por la abnegación de la tragedia clásica. La historia de amor algo recargada de sorpresas y la transformación del personaje a mitad de la narración, con giros de guion también algo forzados pero sorpresivos, llenan la película del suficiente interés para mantenernos atrapados hasta el final. Ingredientes como la presencia de un personaje de aparente carácter obsesivo pero que desarrolla matices de «héroe/antihéroe» romántico, llena la historia de mucha carga emocional, tratando un tema que por desgracia hace tiempo que se mantiene de actualidad llenándola de sentido dramático personal que conmueve.
La excelente ambientación y una fotografía poderosa de David Acereto, que brilla tanto en los escenarios interiores como en los luminosos escenarios naturales, hacen atractiva su visualización en pantalla grande. Además, los protagonistas están encarnados por actores y actrices de gran solvencia y atractivo personal, empezando por Álvaro Morte -un actor de continua asiduidad en series de TV pero incomprensiblemente con poco bagaje en cine, tan solo una participación en el film “Durante la tormenta” (2018) y esta, de la que estamos hablamos, “Objetos”- aquí se construye un personaje que va ganándose al espectador a medida que avanza la historia. Le acompañan en los papeles principales la actriz argentina, cantante, modelo y diseñadora Eugenia Suarez, que está brillante como actriz y como belleza, y completa el trio de actuaciones principales la madrileña Verónica Echegui con un papel de madurez entrañable.
Tiene su interés y es visualmente atractiva.
Pepe Méndez
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