Año: 2022

País: Estados Unidos

Dirección: Paul Schrader

Guion: Paul Schrader

Reparto: Joel Edgerton, Sigourney Weaver, Quintessa Swindell, Esai Morales, Victoria Hill, Eduardo Losan, Rick Cosnett.

Música: Devonte Hynes

Fotografía: Alexander Dynan

Crítica:

Con “El Maestro JardineroPaul Schrader sigue demostrando su talento en la escritura de buenos guiones que son convertidas por él, en obras cinematográficas con narrativa llenas de maestría y dominio del temple emocional en cada secuencia, y eso, confirma que el maestro, a punto de cumplir sus 77 años, conserva intacto su talento y su clara visión del mundo que le rodea.  

La historia comienza con que Sra. Hevernill (Sigourney Weaver) es una rica hacendada que tiene en su finca un maravilloso jardín (Gracewood Gardens) que es la envidia de la región. Para cuidarlo, ha depositado toda su confianza en Narvel Roth (Joel Edgerton) un rígido horticultor que cuida y estudia meticulosamente cada una de las plantas de ese espléndido rincón. Narvel, tiene un equipo de ayudantes a los que intenta trasmitir sus conocimientos y amor por la naturaleza, resultado por el que la poderosa hacendada Sra Hevernill, le recompensará. A cambio, le pide que pruebe a integrar en su equipo de ayudantes a su sobrina-nieta, Maya (Quintessa Swindell) casi una desconocida para ella, y trate de enseñarle lo que él sabe. Maya se presenta como una extraña y, partir de ese momento, en la que parecía una plácida comunidad que todo se desarrollaba armónicamente, se empiezan a desencajar algunos engranajes de vida que hará cambiar la visión de los personajes y el desarrollo de la historia.

Schrader nos recuerda lo manipulables que podemos llegar a ser en la forja de nuestra educación, cuan fácilmente se nos puede inocular el sentimiento del odio o el del amor en nuestra fase adolescente y, como el poder de una mala educación induce a cometer errores difíciles de reparar y de olvidar. Narvell es consciente de haber pasado por esa fase, pero ha logrado cambiar su pasado y sus convicciones para integrarse en algo que le hace sentirse más respetable, cuyos frutos le dan, también, más satisfacciones. Pero con la llegada de Maya vuelven a reproducirse circunstancias que no deseaba, pero que le obligarán a afrontarlas con dureza y, el riesgo de volver a equivocarse. El bien y el mal, el castigo y el perdón, la fragilidad y el sometimiento, la condena o la salvación, son ejemplos simbólicos presentes en la historia de El maestro jardinero, que los personajes encarnan con dignidad y resignación. Seres humanos esclavos y reflejo de su caparazón, desempeñando su inequívoco papel en la compleja sociedad en la que se relacionan, unos dispuestos al sacrificio, otros, los más poderosos, descabalgando su orgullo ante la evidencia de que el poder superior, el poder invencible es el amor.

La película pasa por tres fases narrativas con diferente fuerza emocional y acierto visual que se traducen en: una atractiva seducción en el primer tercio del film, un interesante seguimiento en el desarrollo argumental en el segundo tercio (pero algo más convencional) y, un desenlace que sin ser previsible, no nos sorprende tanto como esperábamos pero que satisface nuestras expectativas. La película esta contada con maestría, cierto permanente suspense y, aun en los momentos más duros, narrada con elegancia. A todo ese conjunto ayuda el carisma que los tres interpretes principales, Joel Edgerton, Sigourney Weaver y Quintessa Swindell imprimen a sus personajes. Un ritmo pausado, reflexivo, sin recrearse en los momentos violentos, unas escenografías que nos aproximan a la naturaleza mas cercana y unos diálogos inteligentes con matices poéticos que evocan la raíz de nuestra existencia vital y la fuerza del amor, completan una obra destacable, que hace vivir emociones desiguales.

Pepe Méndez